Con la salvedad de los espumosos, la
tendencia en los hogares españoles es beber menos vino con calidad
diferenciada El canal de alimentación en este apartado ha descendido un
4,6%, tanto en volumen como en valor, mientras el precio se ancla en
los 2,26 euros por litro, durante los seis primeros meses del año.
Los datos oficiales en el ecuador de 2011 son
demoledores. El consumo de vino en el canal de alimentación en los
hogares españoles ha caído más de cuatro puntos, tanto en volumen como
en valor, aunque la cotización media no sufre variaciones reveladoras y
queda estable en los 2,26 euros por litro. Las ventas han supuesto 447
millones de euros, por un volumen de 198 millones de litros, según el
panel de consumo alimentario del Ministerio de Medio Ambiente y Medio
Rural y Marino (MARM).
Así los mayores descensos se ceban en los
vinos con denominación de origen y también en los tranquilos sin
denominación, aunque en menor grado. Si a finales de 2010 el consumo de
vinos con calidad diferenciada aumento de modo significativo, ya los
primeros meses del presente arrojaron una fuerte caída. Ahora en la
primera mitad de 2011, este descenso se ha ido moderando: un -6,4% en
valor y un -5,2% en volumen, con una rebaja del precio medio del -1,3%.
Los vinos tranquilos sin DOP también sufren una reducción en su
con-sumo doméstico, aunque algo menor, cayendo un -5,5% en valor y un
-4,5% en volumen.
Sin embargo, la cara dulce son los espumosos
y cavas, que muestran una evolución positiva. En volumen solo ascienden
un 1,1% y el incremento en valor es del 6%. Su precio medio asciende a
un 4,9%, hasta los 4,84 euros por litro.
En términos
interanuales la situación general tampoco da razones para el optimismo.
Entre julio de 2010 y junio de 2011, el consumo en hogares ha caído un
-6,5% en valor (1.038,8 millones de euros) y un -4% en volumen (425,2
millones de litros), con caídas generalizadas en todos los productos.
Los datos oficiales desvelan el incesante aumento de la categoría Otras
bebidas con vino, como sangrías y tintos de verano: en el primer
semestre de 2011, su desarrollo es del 23,2% en valor y del 28,5% en
volumen.