El Foro Europeo de Regiones del Olivar, impulsado por Andalucía, aglutina y representa los intereses de 10 regiones productoras de aceite de oliva de Europa.
La consejera de Agricultura y Pesca,
Clara Aguilera, ha presidido en Bruselas la constitución del Foro
Europeo de Regiones del Olivar que, impulsado por Andalucía, aglutina y
representa los intereses de 10 regiones productoras de aceite de oliva
de Europa. Con esta iniciativa se pone en valor la importancia de las
propuestas que surgen desde las regiones hacia el diseño de estrategias
conjuntas, de modo que todo el sector europeo del olivar pueda
beneficiarse de la inteligencia colectiva, ha asegurado Aguilera.
Su principal cometido será influir en
las políticas comunitarias y en el proceso de tomas de decisiones que
afectan al olivar, a través de iniciativas que contribuyan a mejorar la
competitividad, sostenibilidad, calidad y comercialización. En concreto,
las regiones que se han adherido a esta nueva entidad son
Dubrovnik-Neretva e Istria (Croacia); Andalucía y Cataluña (España);
Córcega, Langedoc-Rousillon, (Francia); Sterea Ellada (Grecia), y Emilia
Romagna, Puglia y Toscana (Italia). Estos territorios engloban 2,2
millones de hectáreas, lo que supone casi la mitad de la superficie
europea destinada al cultivo del olivar.
Este Foro surge al amparo de dos redes
europeas de cooperación entre regiones ya existentes: la Asociación de
las Regiones Europeas Productoras de Frutas y Hortalizas (Areflh) y de
la Asociación de Regiones Europeas de Productos de Origen (Arepo). En
ese sentido, Clara Aguilera ha destacado el alto nivel de participación
territorial con la que nace esta nueva entidad, que está abierta a
todas aquellas zonas oleícolas europeas que así lo deseen. En su
opinión, el liderazgo que actualmente ostenta Europa en producción y
comercialización de aceite de oliva requiere de una única voz con la que
defender un sector olivarero, que debe ser reconocido y respaldado por
sus múltiples contribuciones al conjunto de la sociedad.
En la sesión constitutiva también se han empezado a marcar las
prioridades de un calendario de trabajo (2012 a 2015) que contempla los
puntos básicos imprescindibles para afrontar los retos de futuro que
debe superar el olivar europeo para garantizar su viabilidad económica.
En un primer diagnóstico, los perjuicios causados por acuerdos
comerciales con países terceros, la atomización de la oferta, la falta
de relevo generacional o el uso del aceite como producto reclamo en los
supermercados, son aspectos que se han identificado como factores
negativos y que están desembocando en una pérdida generalizada de renta y
en una imparable bajada de los precios al productor.
Entre las primeras propuestas para superar estos problemas, el nuevo
Foro estudiará la puesta en marcha de un observatorio europeo de precios
y mercados de aceite de oliva con el objetivo de suministrar la sector
información ágil y veraz sobre las operaciones comerciales en toda la
Unión Europea.