Los agricultores del marco Montilla-Moriles fueron los encargados de inaugurar la vendimia en Europa.
Los agricultores de la Denominación
de Origen Montilla-Moriles tienen previsto dar por finalizada, este
fin de semana, la vendimia de este año, en el que se han recogido 55
millones de kilos de uva, una cifra que supone el 37 por ciento más
que la vendimia de 2009, que terminó con 40 millones de kilos.
Según los datos aportados en un comunicado por el Consejo
Regulador de la Denominación de Origen Protegida (D.O.P.)
Montilla-Moriles, a pesar de este incremento en la uva recogida, la
producción de vino dulce Pedro Ximénez se reducirá en un 36 por
ciento con respecto al año pasado, puesto que 3,5 millones de kilos
de uva se van a dedicar a la pasificación, mientras que en 2009 se
pasificaron 5,5 millones de kilos.
Con estos datos de uva recogida, el Consejo Regulador espera una
producción final de vino de 370.000 hectolitros, de los que unos
10.000 serán de mosto procedente de uva pasificada para elaboración
de vino dulce Pedro Ximénez, y el resto para elaboración del resto
de vinos de la Denominación de Origen.
La campaña de recogida de uva 2010 se ha visto marcada por la
fuerte tormenta registrada a mediados de agosto y que ha ocasionado
complicaciones de recolección para los agricultores y de
organización y recepción en los lagares de la Denominación de
Origen.
Según el Consejo Regulador de Montilla-Moriles, la calidad de la
elaboración puede considerarse buena a pesar de los problemas de
Botrytis aparecidos tras la tormenta y que han afectado a áreas
localizadas de la zona de producción de la Denominación de Origen.
Los agricultores del marco Montilla-Moriles fueron los encargados
de inaugurar la vendimia en Europa, puesto que a primeros de agosto
comenzaron a recoger las uvas de las 6.000 hectáreas de viña de uva
blanca y PX y unas 1.500 hectáreas de viña para vino tinto.
Con la PX se elaborarán los característicos vinos de
Montilla-Moriles, como son los finos, PX (dulce), amontillados,
olorosos y vinos jóvenes, todos ellos amparados por la Denominación
de Origen.
Los tintos, amparados bajo la figura de Vinos de la Tierra, darán
lugar a tintos de crianza y reservas y comenzaron a elaborarse a
raíz de la reconversión varietal realizada en los últimos nueve años
con los planes de reestructuración promovidos por Bruselas.