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El Centro Tecnológico Andaluz del Sector Cárnico (TEICA), ubicado en la localidad de Cortegana (Huelva), se ha planteado para 2011 el reto de fortalecer su presencia nacional e internacional.

Así lo ha puesto de manifiesto en rueda de prensa de balance de 2010 el gerente, Juan Carlos Racero, quien ha apuntado otros objetivos como avanzar en la realización de proyectos de cooperación y consolidar la plantilla del centro, que actualmente está formada por seis personas.

Según ha puesto de manifiesto, ha cerrado el ejercicio 2010 con nueve socios nuevos, por lo que ha alcanzado ya 37 miembros, entre patronos y colaboradores pertenecientes a empresas cárnicas de Andalucía, firmas auxiliares y entidades públicas y privadas.

El TEICA, que nació con el objetivo de mejorar la capacidad competitiva del sector cárnico mediante la transferencia de investigación y el fomento de la cooperación empresarial, ha participado durante el año 2010 en dos proyectos de I+D+i y para el presente ejercicio tomará parte en más de una decena de estudios.

En cuanto a los proyectos en los que ha estado inmerso el centro el año pasado, se trata de un estudio para probar la inexistencia de toxoplasma gondii, responsable etiológico de la toxoplasmosis humana, en los jamones curados, lo que hace que se desaconseje su consumo en población de alto riesgo como mujeres embarazadas.

Otro proyecto, dentro de la modalidad Excelencia Motriz, consiste en la búsqueda de descriptores para diferenciar la calidad en el jamón ibérico de animales alimentados con cebo en régimen intensivo y extensivo.

Con el fin de avanzar en la transferencia de conocimiento hacia el tejido productivo, el TEICA tiene previsto participar en más de diez proyectos de investigación relacionados con la producción, conservación y comercialización del producto.

Entre ellos se encuentran el estudio de la optimización del uso de la sal en el proceso de elaboración de jamón ibérico; la mejora de la presentación de jamón loncheado y estudio de nuevas formas de presentación y alargamiento de la vida útil del producto; o el desarrollo de un método de control biológico basado en bacterías entomopatógenos para el control de los ácaros del jamón, además de un proyecto de lucha contra el ácaro del jamón.