Esta Orden exime a los ganaderos del pago de los Materiales Específicos de Riesgo.
La Asociación Española de Empresas de
la Carne (Asocarne) estudiará la posibilidad de recurrir la Orden
que establece un nuevo sistema de control del destino de los
subproductos generados en la cadena alimentaria cárnica y que exime
a los ganaderos del pago de los Materiales Específicos de Riesgo.
Así lo ha manifestado el secretario general de la
Asociación Española de Empresas de la Carne (Asocarne), Fernando
Pascual, tras la publicación de esta Orden en el Boletín Oficial
del Estado (BOE).
Pascual ha especificado que estudiarán recurrir la nueva
normativa en "una próxima junta directiva" de la asociación.
Por su parte, el secretario general de la Asociación Profesional
de Salas de Despiece y Empresas Cárnicas (Aprosa), Manuel González,
ha considerado injusta la nueva normativa y ha resaltado que aún no
saben si la recurrirán, ya que tendrán que reunirse los mataderos
para analizarla y ver sus consecuencias.
El secretario general de Asocarne ha apuntado que el Gobierno no
tiene competencias para indicar cómo se reparten los costos a lo
largo de la cadena alimentaria cárnica, ya que es una cuestión del
mercado.
Ha explicado que los mataderos privados que comercializan la
carne procedente de animales sacrificados en su propio matadero
pueden hacer la traslación de esa tasa hacia adelante de la cadena.
Sin embargo, es diferente para los mataderos de maquila que
tienen como clientes al "emperador", que es la figura comercial que
se encarga de llevar los animales a sacrificar y que puede coincidir
en algunas ocasiones con el ganadero.
Para éstos, según González, la única posibilidad es, o bien no
repercutir el coste en cumplimiento de esta Orden o repercutirlo a
su cliente que es el "emperador", lo que podría ser ir hacia atrás
en la cadena (si es ganadero) y se estaría en contradicción con la
nueva normativa, "por lo que es ahí es donde está el problema".
En este sentido, ha explicado que se trataría de convencer a la
administración de que en el caso de los mataderos de maquila el
único cliente es el "emperador" y no es posible repercutir el coste
hacia nadie más.