El acuerdo estaba en vigor de forma provisional desde 2012, pero el protocolo inicial fue tan restrictivo para la flota española, según el sector, que la mayoría de barcos no salieron a faenar
El pleno del Parlamento Europeo dio luz verde a la renovación del protocolo de pesca con Mauritania que divide a los pescadores gallegos, canarios y andaluces, al permitir faenar a los marisqueros pero no a los cefalopoderos (pulpo).
Con el voto dividido de los eurodiputados españoles, el acuerdo ha salido adelante con 467 votos a favor, 154 en contra y 28 abstenciones. El PP se ha inclinado mayoritariamente por el rechazo al acuerdo mientras que en el PSOE han votado a favor los andaluces, en contra los gallegos y canarios y el resto ha preferido la abstención.
El acuerdo estaba en vigor de forma provisional desde 2012, pero el protocolo inicial fue tan restrictivo para la flota española, según el sector, que la mayoría de barcos no salieron a faenar.
Tras la última ronda de negociaciones con Nuakchot, los marisqueros andaluces vieron mejoradas sus condiciones y se mostraron abiertos a probar suerte en el caladero mauritano. Sin embargo, el país africano se ha negado hasta la fecha a dar entrada a sus aguas a la flota de cefalopodero, lo que perjudica a las flotas gallega y canaria.
El convenio con Mauritania, suscrito en 2012, estableció condiciones restrictivas para la flota española, así como para las otras 11 europeas que faenan en sus aguas (Italia, Portugal, Grecia, Francia, Reino Unido, Malta, Holanda, Alemania, Polonia, Lituania y Letonia).
El pasado septiembre se celebró una reunión entre la UE y Mauritania, en Nuakchot, en la que se consiguieron avances para una parte de la flota española, como la marisquera, mientras que la situación de los cefalopoderos se mantuvo.
Durante la última semana, el ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente y la Xunta de Galicia han hecho gestiones en Bruselas para tratar de convencer a los eurodiputados contra la ratificación del acuerdo. Los distintos intereses regionales se hicieron palpables este lunes igualmente entre la consejera de Agricultura y Pesca de Andalucía, Elena Víboras, y la consejera del Medio Rural y Marino de Galicia, Rosa Quintana, que mostraron sus discrepancias al término de un Consejo Consultivo sobre Pesca entre Gobierno y las Comunidades Autónomas.
El Protocolo de Pesca con Mauritania es el más importante de la UE en términos de volumen y de contribución financiera, dado que por el acceso de la flota comunitaria a sus aguas se pagan 70 millones de euros al año. Se incluyen ocho categorías de pesca: especies pelágicas, merluza y especies demersales (aquellas que viven en el fondo del mar), mariscos (gamba, langostino, cigala y cangrejo) y atún.
Tras el voto, el eurodiputado gallego del PSOE Antolín Sánchez Presedo se mostró comprensivo con los parlamentarios que han preferido dar el sí al acuerdo "como mal menor". El eurodiputado fue asimismo optimista de cara a la renovación del acuerdo en 2015 y las oportunidades que podrían darse para nuevas especies, entre ellas los cefalopoderos. "Este acuerdo es por un periodo de dos años, consecuentemente habrá que empezar la negociación para el futuro y habrá que actuar de otra manera", dijo en declaraciones a Efeagro.
Por su parte, Gabriel Mato (PP), que es además presidente de la Comisión de Pesca en el PE, valoró el acuerdo pero señaló que las mejoras alcanzadas en últimas semanas "no son suficientes". "Se excluye a los pescadores gallegos sin razón", añadió.
