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El consumo habitual de cereales integrales se asocia a una mayor longevidad, ya que su ingesta disminuye la mortalidad general y, sobre todo, la tasa de muerte cardiovascular, según ha demostrado un estudio científico, informa la Fundación Española del Corazón (FEC).

El estudio, realizado por investigadores de la Harvard School of Public Health y publicado en la revista JAMA Internal Medicine, ha analizado la asociación entre una dieta regular rica en cereales integrales y el riesgo de mortalidad total y cardiovascular.

La investigación evidencia que por cada 28 gramos de cereales integrales ingeridos se reduce un 5 % el riesgo de muerte prematura y un 9 % el riesgo de fallecer por causa cardíaca.

Los cereales integrales al no haber sido sometidos a un proceso de refinamiento poseen mayor número de nutrientes (vitaminas y minerales) y proporcionan una de las mayores fuentes de fibra, razón por la cual son tan saludables, explica la FEC en un comunicado.

La fibra ayuda a ralentizar la digestión y previene los aumentos peligrosos de los niveles de azúcar en sangre.

Según la doctora María Elisa Calle, coordinadora del Comité Científico del Programa Alimentación y Salud de la FEC, los cereales integrales, al tener tanta fibra, ralentizan y disminuyen la absorción tanto de colesterol como del azúcar, con lo que contribuyen a disminuir el riesgo de diabetes en la edad adulta y también ayudan a disminuir los niveles de colesterol total.

Desde esta sociedad científica se recomienda consumir diariamente al menor cuatro raciones (200 gramos) de cereales al día y que, como mínimo, una ración (50 gramos) sean integrales, lo que equivale a una rebanada de pan de molde, media barrita de pan u ocho galletas".