La legislación actual sobre protección de los animales durante el transporte y las operaciones conexas establece que la CE tendrá que presentar al Parlamento Europeo y al Consejo, antes de enero de 2011, un informe sobre las repercusiones de dicha normativa.
La
Comisión Europea (CE) ha señalado que no puede considerarse
la existencia de indicadores de bienestar de los animales en la legislación
europea como "requisito imprescindible" para modificar el Reglamento
comunitario sobre bienestar de los animales durante el transporte.
Así lo ha asegurado la comisaria europea de Sanidad, Androulla Vassiliou, en
una intervención escrita con la que responde a una cuestión de la diputada del
Partido Popular Europeo (PPE) Esther Herranz, en la que le pregunta si no sería
necesario disponer de indicadores objetivos de bienestar antes de presentar una
nueva propuesta para modificar la normativa sobre transporte de animales.
Vassiliou ha indicado que la inclusión de esos "indicadores de
bienestar" es un objetivo "a largo plazo" de la CE y ha recordado que, por
ejemplo, ya se han integrado en la legislación recientemente adoptada sobre
protección de los animales en el momento de la matanza.
Sin embargo, ha asegurado que, en este caso, no pueden considerarse
"imprescindibles", especialmente porque en la elaboración de la nueva
legislación de transporte se van a tener en cuenta "datos científicos
consolidados" sobre este proceso, así como cuestiones "socio-económicas".
Ha precisado que la legislación actual sobre protección de los animales durante
el transporte y las operaciones conexas establece que la CE tendrá que presentar al
Parlamento Europeo y al Consejo, antes de enero de 2011, un informe sobre las
repercusiones de dicha normativa.
Ha detallado que ese documento tendrá que tener en cuenta tanto las pruebas
científicas sobre las posibles necesidades en materia de bienestar animal que
plantee la legislación actual como las consecuencias socio-económicas que
suponga.
Ha explicado que, cuando proceda, podrá ir acompañado de las propuestas
legislativas "pertinentes" sobre los viajes largos, en particular, en
lo que se refiere a la duración de trayectos, los períodos de descanso y el
espacio disponible.
Respecto a los datos científicos que ya han sido solicitados por la CE, ha asegurado que indican
"claramente" que desde 2002 para mejorar el bienestar de los animales
durante el transporte, deben modificarse la duración de los trayectos, los
períodos de descanso y el espacio disponible, aunque ha reconocido que la CE estudia actualmente si esas
conclusiones científicas deberían actualizarse.