Las especies más cultivadas son la dorada y la lubina, con casi 7.500 toneladas de producción anual.
La facturación de los productos de la acuicultura andaluza ha
alcanzado los 45,8 millones de euros anuales, lo que supone la
consolidación de un sector que ha contado con un total de 37 ayudas de
la Consejería de Agricultura y Pesca a través del Fondo Europeo de
Pesca (FEP 2007-2013) por un importe de 16,3 millones de euros.
Las
subvenciones concedidas hasta la fecha corresponden a un aumento de la
producción por nueva construcción de instalaciones o ampliación de las
ya existentes, a un incremento de la producción por modernización de
las instalaciones (adquisición de nuevo equipamiento), y los destinados
a proyectos piloto de carácter experimental.
Como consecuencia
de estas ayudas, las 114 empresas de acuicultura marina que operan en
Andalucía y que integran un total de 186 establecimientos dedicados a
cultivos marinos han aumentado su producción respecto a años
anteriores. Por especies, la dorada y la lubina siguen acaparando la
mayor parte de la producción, con un 87% del total, con 7.463 toneladas
en 2009, 603 toneladas más que el año anterior. Le sigue en volumen de
producción el mejillón, que supone el 4,4% de la producción acuícola
total. Otras especies como el atún rojo, la corvina o la seriola
también han aumentado muy significativamente su producción en cultivos
marinos.
Por provincias
Por provincias,
Almería produjo en 2009 un total de 2.194 toneladas repartidas, entre
otros productos, entre lubina (54%) y dorada (36%); Cádiz, por su lado,
cuenta con 1.851 toneladas producidas que responden fundamentalmente a
dorada (61%), lubina (21%), mejillón (4%), ostión (3%), lisa (2%) y
langostino japonés (1%).
En la provincia de Huelva, la
producción fue de 1.364 toneladas repartidas entre dorada (70,5%),
lubina (26,2%) y langostino japonés (2,5%), entre otras especies. La
provincia de Sevilla, por su parte, aporta 786 toneladas procedentes de
un único establecimiento ubicado en un enclave natural donde se produce
lubina (71,2%), lisas (12,5%), camarón (11,2%), corvina (3,4%) y
anguila (1,5%) seguidas de dorada.
El volumen de producción de
Granada fue de 678 toneladas distribuidas entre doradas (88,5%), lubina
(11,3) y lenguado y seriola, mientras que la provincia de Málaga
produjo 590 toneladas de dos especies: dorada (58,5%) y mejillón
(41,5%).
En lo que se refiere a la creación de empleo el sector
andaluz de la acuicultura ha generado 654 puestos de trabajo directos,
siendo además un empleo estable al tratarse de personal técnico y
cualificado.
Un sector emergente desde los años 80
La
actividad acuícola en Andalucía comenzó a adquirir importancia en los
años 80 constituyendo en la actualidad un sector relevante que puede
complementar la pesca tradicional, amortiguando y minimizando los
efectos negativos que está ocasionando el retroceso del sector
extractivo. De ahí que gran parte de las nuevas iniciativas de cultivo
sean apoyadas por agrupaciones y organizaciones del sector pesquero
andaluz, que están entrando de forma gradual en la acuicultura marina.
Andalucía
cuenta en la actualidad con 8.709 hectáreas de superficie donde se
ubican instalaciones distribuidas a lo largo de los 1.100 kilómetros de
costa andaluza dedicadas a cultivos marinos que contribuyen al
desarrollo económico de las zonas costeras. Esta actividad se
desarrolla en dos zonas bien diferenciadas, una en la zona
suratlántica, que abarca las provincias de Huelva, Sevilla y Cádiz,
donde predominan los cultivos en tierra (estanques excavados en la
marisma, parques de cultivos o reutilización de antiguas salinas entre
otras), y otras zona surmediterránea, que abarca el resto de provincias
costeras y donde predomina el cultivo en mar abierto.
Cádiz,
Huelva y Sevilla concentran el 91% el de la superficie autorizada para
estos cultivos y el 88% de las instalaciones. En estas zonas, en las
que está ampliamente representada la región suratlántica, hay
instalaciones en enclaves naturales integrados por salinas y marismas
transformadas (Cádiz, Huelva y Sevilla); parques de cultivo de moluscos
en pequeñas zonas intermareales de ecosistemas marinos semicerrados
(Huelva y Cádiz), así como establecimientos en tierra firme, de dominio
público portuario y que se corresponden con centros de reproducción,
cría y preengorde, o con granjas de engorde de especies que precisan
mucho control de las condiciones de cultivo.
Por su parte, las
zonas de acuicultura en mar, a pesar de contar con menos
establecimientos y menor superficie autorizada, generan el 52% de la
biomasa en fase de engorde y el 42% del valor económico de toda la
producción generada en Andalucía (incluida la cría y el preengorde). En
este caso, la actividad se lleva a cabo en polígonos con sistemas de
cultivos de engorde de peces desarrollados en jaulas flotantes o
semi-sumergibles y en polígonos con sistemas de cultivo vertical de
moluscos desarrollados en bateas o 'long lines'.