La Consejería ha mantenido numerosas reuniones con el sector pesquero afectado para abordar la actual situación del marisqueo.
La Consejería de Agricultura y Pesca tiene como objetivo primordial
garantizar el mantenimiento del caladero de la chirla en el Golfo de
Cádiz, tras la drástica reducción que sufrió su población el pasado
año, así como la actividad económica y los puestos de trabajo que esta
pesquería genera. Para ello, es necesario implantar una serie de
mecanismos, recogidos en la Orden publicada en el Boletín Oficial de
la Junta de Andalucía el pasado 1 de julio, para regular las
embarcaciones con draga hidráulica, adaptarlas a la situación actual
del caladero y permitir medir las capturas reales de la flota a fin de
garantizar la sostenibilidad de la especie.
La Consejería ha mantenido numerosas reuniones con el sector
pesquero afectado para abordar la actual situación del marisqueo. En
concreto, la comisión de seguimiento de la chirla de este Departamento
ha tenido un total de 11 reuniones y en la última, a fecha de 10 de
mayo, se presentó al sector el texto de la Orden, la cual, fue
previamente acordada en su mayoría con el propio sector pesquero
afectado, si bien, no es siempre posible consensuar el total de las
medidas.
En este sentido, la Consejería quiere recalcar que seguirá estando
abierta al diálo-go, como hasta ahora, con el fin de salvaguardar esta
pesquería, así como la actividad socioeconómica y los bancos de chirla
de los que ésta depende.
La nueva Orden registra cinco cambios significativos, de los cuales,
tres han sido modificados siguiendo las directrices del propio sector.
El horario de entrada y salida a puerto es el establecido por el
sector; mantener el mismo horario en verano y en invierno, a petición
del sector; intensificación de las sanciones a aquellas embarcaciones
que no cumplan la norma, a petición del sector. Además se ha regulado
el horario de faena y el plan de ajuste del esfuerzo pesquero.
El sector pesquero de la chirla se ha beneficiado de ayudas por
parte del Fondo Eu-ropeo de Pesca por un importe de 3,4 millones de
euros para la paralización temporal de la flota pesquera, si bien,
éstas deben ir acompañadas de paralizaciones definitivas. Esta nueva
orden de regulación viene a asegurar, mediante el plan de ajuste,
dichas ayudas.
En cuanto al horario de faena, se ha establecido una máxima de 5
horas, siendo ésta la media que el sector dedica ya a la pesca para
obtener los 200kg que establecía la antigua orden. Este nuevo mecanismo
permite medir las capturas reales de esta flota, basándose en los
rendimientos validados por el Instituto Español de Oceanografía y
controlable por el Sistema de Localización y Seguimiento de
Embarcaciones Pesqueras de Andalucía (cajas verdes), obteniendo así
información real de las capturas a fin de evitar que se agote el
caladero.
Cierre del caladero de seis meses
El pasado 16 de junio, la Consejería de Agricultura y Pesca volvió a
autorizar la pesca de la chirla en el Golfo de Cádiz tras seis meses de
cierre del caladero, a consecuen-cia de la drástica reducción de la
población de especie durante el pasado año. En este sentido, la nueva
Orden complementa esta decisión y se ajusta a la recomendación del
Instituto Español de Oceanografía que considera que 88 embarcaciones de
draga hidráulica realizan un esfuerzo pesquero mayor de lo que el
caladero puede aguantar tras el agotamiento del mismo en el año 2010.
Estas medidas se ponen en marcha con el objetivo de garantizar tanto
la sostenibi-lidad del caladero de la chirla como el control del
esfuerzo pesquero.